Está claro que en nuestro planeta sin el agua no existiría la vida. Es, junto con el oxígeno, primordial para el mantenimiento de la vida. Es un nutriente inorgánico compuesto por dos moléculas de hidrógeno y una de oxígeno, siendo aproximadamente dos tercios de nuestro peso y dos tercios de la superficie terrestre. El agua de nuestro organismo se renueva constantemente, siendo un ciclo completo cada 7-11 días. Mientras que sin comida podríamos vivir hasta 60-70 días, sin agua ni alimento no podríamos subsistir más de dos semanas. En ello radica la importancia del agua en nuestra dieta.
Funciones del agua
El agua, aparte de oxígeno e hidrógeno, lleva disueltos gases como el dióxido de carbono y minerales en proporciones variables según su origen: cloruros, calcio, magnesio, hierro… Al igual que todos los nutrientes cumple diversas funciones: elemento estructural de las células, transporte de nutrientes, esencial para la digestión, absorción y excreción. Además, regula la temperatura corporal y es el medio donde se realizan los cambios químicos.
¿Cuánta agua necesitamos tomar al día?
Debemos mantener el equilibrio hídrico durante el día, de forma que la ingesta de agua sea igual que las pérdidas que se producen. ¿De dónde obtenemos agua? La mayoría de las bebidas, entre 1,3-1,4 litros al día; después de los alimentos, sobre 1 litro al día y entre 0.3 y 0,4 litros del propio metabolismo. ¿Y dónde se pierde? Alrededor de 1,4 por la orina, 1,1 litros por piel y pulmones, y 0,2 litros por las heces. Todos estos valores se ajustan según la sudoración, el deporte, enfermedades,…
El mecanismo de la sed se localiza en el hipotálamo cuando la concentración de sales es más elevada de lo normal: cuando se ha perdido alrededor un 2% el agua corporal. Lo que sí sucede es que con la edad los mecanismos de la sed están alterados y debemos forzarnos un poco a beber. Además, en situaciones de disfagia, quizás el agua no es tolerada en estado líquido. Por ello hay que buscar alimentos con mayor contenido en agua para paliar esa menor ingesta.
