Hace algunas décadas se pusieron de moda los alimentos 0% materia grasa o con menor contenido en grasa. Luego estuvieron de moda los productos 0% azúcares añadidos o bajos en azúcares. Todo para vendernos productos procesados o ultraprocesados como más sanos en vez de optar por productos sin procesar y más cerca de la materia prima original.
Productos con proteínas añadidas
Y sin haber perdido en los lineales estos dos tipos de productos, nos encontramos de pronto con otra solución de la industria: ¡productos con proteínas añadidas! Ahora tenemos otra “obligación” más, debemos comer sin grasa, sin azúcar y con muchas proteínas, la industria nos dicta lo que tenemos que comer.
Según vamos cumpliendo años vamos perdiendo masa muscular, sobre todo a partir de los 40 y más a partir de los 50. Tener una masa muscular en condiciones es fundamental para garantizar nuestra autosuficiencia de cara al futuro y poder hacer cosas tan sencillas como sentarse y levantarse del suelo sin usar las manos, subir escaleras o hacer nuestras tareas diarias. Para conseguirlo hay que conjugar el ejercicio físico funcional con una ingesta adecuada de proteínas sin la cual no se puede mantener la musculatura.
¿Cuántas proteínas necesito al día?
¿Pero estoy tomando suficientes proteínas en mi día a día o necesito estas que me vende la industria? Bueno, casi nadie cuenta las proteínas que ingiere a diario, pero convendría hacerlo al menos una semana para ver cuánto tomamos. Estas pueden ser de origen animal o vegetal; incluso el pan integral tiene alrededor de un 11% de proteínas (el blanco menos, sobre un 8%), por lo que tenemos que contabilizar todas las que tomamos al día y en una semana completa, y mejor si están distribuidas durante el día.
¿Cuántas necesito? Los estándares dicen que entre 0,8 y 1 gramos de proteína por kg de peso al día como mínimo. Para una persona de 70 kg serían entre 56 y 70 gramos de proteína al día. Pero esta cantidad se puede llegar incluso a doblar si hay necesidades energética especiales como el caso de deportistas: ya habría que personalizar según el tipo de deporte practicado, no es lo mismo levantamiento de pesas que correr maratones. Si con la alimentación convencional no se llegase a las proteínas necesarias por nuestro estilo de vida, entonces y sólo entonces, se podría suplementar con algún producto enriquecido de proteínas o batidos proteicos, pero al final un yogur enriquecido siempre va a salir más caro que un yogur natural normal, que ojo, ya tiene de por sí 8 gramos de proteína.
